Hola, soy Shirley Daza, fundadora de Shirley Daza Aesthetic Center, y esta es la historia real que le dio sentido a mi vocación: cuidar, transformar y acompañar a personas que, como yo, han aprendido a cuidarse, a quererse y a priorizar su bienestar desde el amor propio.
Llegué a Estados Unidos como muchas personas: sin saber exactamente cómo empezar, pero con la certeza de que quería salir adelante. Mientras trabajaba como babysitter para una familia, decidí formarme. Estudié Masaje Terapéutico y Drenaje Linfático en el Florida Professional Institute, y luego me certifiqué como Esteticista en Celebrity School.
Al graduarme, comencé a trabajar dando masajes a domicilio. Por casi dos años ofrecí drenajes, masajes terapéuticos y tratamientos postquirúrgicos. Iba de casa en casa, con mis materiales en el carro, construyendo paso a paso una red de clientes que valoraban no solo mis manos, sino el cuidado que ponía en cada detalle.
Durante ese tiempo quedé embarazada. Y al cuarto mes, un diagnóstico de diabetes gestacional cambió todo. Fue un momento decisivo: entendí que tenía que cambiar mis hábitos, no solo por mí, sino por la vida que crecía dentro de mí. Modifiqué mi alimentación, empecé a moverme distinto, a entender mi cuerpo y mi salud desde un lugar más consciente. Ese cambio, aunque duro, me salvó la vida.
Mi hija nació anticipadamente. Tenía síndrome de Down y una condición cardíaca. Fue una prueba de Dios, una de esas que te sacuden el alma y te enseñan a ver la vida desde otra perspectiva. Fueron meses difíciles, entre médicos, cuidados intensivos y mucha fe.
Cuando finalmente nos dieron el alta, continué trabajando. Atendía a clientas en sus casas, con el equipo en el carro, organizando mis días entre citas médicas y masajes. Con el tiempo alquilé una cabina Y con mucho amor, ese espacio creció. Hoy somos un centro reconocido por nuestros resultados, por la cercanía con cada clienta, y por un enfoque humano, terapéutico y estético al mismo tiempo.
Nuestra misión es ayudar a cada persona a verse y sentirse mejor, pero desde un lugar profundo, donde la estética se convierte en bienestar integral. Trabajamos cada día para que nuestros clientes recuperen el equilibrio entre cuerpo, mente y emociones, porque creemos que la verdadera belleza comienza desde adentro.
Shirley Daza Aesthetic Center no es solo un lugar para “verte mejor”. Es un espacio para volver a ti, para respirar, para sanar y para recordarte que lo que has vivido también puede ser tu fuerza.
Bienvenido a este pedacito de mi historia. Que también puede ser parte de la tuya.
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